martes, 26 de mayo de 2009

¿Cuanto?

Adictivo...
Ver a la gente alegre
Impresionante
ver los sueños cristalizados

En este tiempo no existe figura que me ilusione
ni propuesta que me emocione
reconozco ideales y utopías
que me mueven, que me llenan de energía

Elejir entre una debil diferiencia
es elejir
la sociedad que anhelo no está cerca
pero la busco incesantemente
mejor hacer que no hacer nada

Castradas la ilusiones por el sistema
nos toca reconstruirlas
y llenarlas de energía
llenarlas de colectivo, de gente que sueña y vibra
al son de la justicia, al son de la sensibilidad

Criticas van y criticas vienen
no siempre constructivas
tolerar algunas cosas
y avanzar en otras
no es algo facil, de hecho a veces triste
la impotencia a veces asoma su mirada

pero no se puede claudicar
no dejar nunca un ideal
una sonrisa por la ruta que sea, es una sonrisa
conservarla nuestra ley
defenderla nuestro dogma

No soy de dogmas
pero la defensa de la alegria deber ser el dogma de la sociedad
tanta falta que hace
y sencillamente no puede haber alegria cuando abunda el llanto y el hambre

Ser la solución, romper con paradigmas
romper un pasado colonial que está tan interiorizado
reconocernos libres y hacer lo que nos dicta la conciencia
y si nos ata algo, ver florecer la rebeldía
que nada nos inmovilice
nada!

Sacrificios hay por doquier
la lucha por definición es de sacrificio
sacrificio...
¿cuanto estás dispuesto a dar por una sonrisa?
¿cuanto?

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Susurros del Tiempo por Diego Zúñiga Céspedesse encuentra bajo una Licencia Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 3.0 Costa Rica License.